La actividad de voluntariado es para mí una filosofía de vida, enormemente gratificante, tanto individual como colectiva.

El mundo del voluntariado no es una actividad nueva para mí, desde muy joven siempre me sentí atraído e interesado por aportar mi grano de arena, intentando mejorar el mundo que me rodea. Durante más de 20 años pertenecí a una asociación internacional, cuyo lema " Nosotros Servimos" me cautivó, lema de Lions Club, ahí descubrí que con poco se puede hacer mucho por los más desfavorecidos de la sociedad.

Como una cosa lleva a la otra, casi sin darme cuenta y aprovechando el disfrute de una de mis pasiones, la pesca submarina, un grupo de amigos que habitualmente competíamos por la captura de la mejor pieza, rivalizábamos para ver quien se llevara a tierra la mayor cantidad de residuos arrancados del fondo marino y así durante años.

Esta idea fue prendiendo cada vez en más aficionados, a día de hoy es una de las actividades estrella del Club Subacuatico Pérez Sub, tanto en actividades propias como en colaboración con otras entidades, tales como cofradías o la propia Afundación, la Obra Social de ABANCA, en su proyecto PLANCTON.

La actividad de voluntariado es para mí una filosofía de vida, enormemente gratificante, tanto individual como colectiva.